El precio de un servicio de instalación de un calentador puede variar según el modelo escogido, su capacidad y la ubicación del inmueble donde se realice el trabajo. El precio de un calentador convencional puede variar entre un mínimo de 90 € y un máximo de 650 €, siendo el precio medio de 250 €. 

Tipos de calentador

En el mercado actual hay dos grandes tipos de calentadores, los de gas y los termos eléctricos. Dentro de cada tipología existen varias clasificaciones. 

Ambas tipologías tienen sus beneficios y sus inconvenientes. Así, mientras los calentadores eléctricos permiten prescindir de la contratación y mantenimiento mensual de un servicio de suministro extra, reduciendo ciertos gastos, tienen una limitación de capacidad. Los modelos a gas ofrecen una mayor duración de agua caliente, ilimitada en el caso del gas natural, lo cual suele ser conveniente cuando son utilizados por varias personas. 

Particularidades

Debido a que ambos tipos utilizan métodos radicalmente diferentes para calentar el agua, es lógico que requieran de instalaciones específicas. Por lo general, si existen las instalaciones previas necesarias, la instalación del aparato no supone grandes diferencias en cuanto a su precio.

En el caso de los calentadores a gas hay que tener en cuenta la conveniencia de la ubicación para evitar accidentes, crear los conductos de gas y extractores (si no existiesen), evaluar posibles fugas, controlar la extracción de gases, etc.

Los calentadores eléctricos, por su parte, son mucho más sencillos de instalar. Ello va a verse reflejado en el precio del servicio, siempre y cuando el inmueble cuente con las instalaciones de fontanería necesarias. 

Gastos

A priori, es difícil asegurar qué sistema produce un mayor ahorro económico a medio y largo plazo. Ello dependerá principalmente del consumo. Si este es medio o bajo, las bombonas de butano o propano resultarán algo más económicas que un servicio de gas natural, pues no requieren de un pago fijo por servicios contratados. Ello dependerá de los precios que se fijen en el sector del gas. No obstante, también es necesario valorar la comodidad de prescindir de la sustitución periódica de bombonas. 

En el caso de los termos eléctricos, conviene optimizar la capacidad del calentador con respecto al número de usuarios que van a utilizarlo.  

Alternativas de ahorro modernas

Hay modelos de calentadores que, al ser más novedosos, no suelen incluirse en las categorías convencionales de tipos de calentadores. Son más respetuosos con el medio ambiente y aunque suponen una opción un poco más costosa y difícil de instalar, son modelos que permitirán, a la larga, ahorrar mucho más dinero pues su consumo de energía es más eficiente y proviene de fuentes naturales y renovables, como el sol. Los calentadores solares o de termosifón permiten ahorrar hasta un 75% de energía eléctrica en comparación con los modelos convencionales. Consiste en combinar paneles solares con un tanque que almacena el agua.

Otra opción similar son los calentadores atmosféricos, es decir, son calentadores que funcionan a gas pero que son compatibles con un sistema de energía solar, utilizando los paneles solares como alimentación alterna para reducir el consumo de su fuente de combustible principal.