El coste medio de reformar un piso para alquiler y convertirlo en un piso de estudiantes es de aproximadamente 420 €/m2. Dependiendo del nivel de intervención que necesite, el precio puede variar entre 230 €/m2 y 650 €/m2, siendo algunos de los factores que inciden en el presupuesto el área total del piso, el tipo de tareas a realizar y las características de los cuartos que se deseen reformar.

Área total (m2)

Muchas empresas que ofrecen el servicio completo de reformar un piso para alquiler y convertirlo en un piso de estudiantes cuentan con una tarifa fija por metro cuadrado. El coste por metro cuadrado dependerá del proyecto a ejecutar, de los materiales empleados y del área del piso que debe ser modificada, ya que no tiene el mismo coste renovar una cocina que un dormitorio. Si para convertir la vivienda en un piso de estudiantes se necesita hacer cambios profundos e intervenir a diferentes niveles, como albañilería, electricidad, fontanería o carpintería, el presupuesto podrá ser significativamente más caro.

Cocina

Lo más costoso de reformar en un piso para alquilarlo y convertirlo en un piso de estudiantes probablemente sea la cocina. Una opción para mejorar el aspecto general de esta estancia es pintar el mobiliario y sustituir las puertas que se encuentren en mal estado. Es importante garantizar que existe suficiente mobiliario para que todos los inquilinos e inquilinas cuenten con su propio espacio de almacenaje, así como las cosas comunes puedan ser fácilmente organizadas.

Si los azulejos son excesivamente antiguos o están estropeados, una solución rápida y económica para renovar el aspecto de la cocina consiste en cubrir las paredes con unas planchas de revestimiento en piedra u otro material similar. No obstante, la opción más habitual es optar por alicatar la pared nuevamente con azulejos de color blanco.

Por otro lado, cambiar la grifería y colocar una más moderna y funcional es una tarea que no supone un gran gasto y una decisión que será valorada por los y las estudiantes. Relativamente a la iluminación, los anticuados tubos fluorescentes deben cambiarse por focos empotrados de luz LED, ya que mejorarán el aspecto estético de la cocina y supondrán un ahorro energético.

Salón

En el salón se debe incluir una mesa de comedor con sillas que sean cómodas, pues lo más probable es que este espacio también se utilice como zona de estudio o de socialización. Al reformar un piso para alquiler y convertirlo en un piso de estudiantes es fundamental que el salón sea diáfano, cómodo y práctico, porque los y las estudiantes pasarán muchas horas aquí.

En cuanto al sofá, una combinación modular es un acierto ante la posibilidad de que se realicen cambios de ubicación del mobiliario. Otras opciones a considerar en estos casos son la inversión en muebles auxiliares, como mesitas y asientos tipo puf, y en estanterías que permitan organizar los objetos presentes en los espacios comunes.

Baño

En cuanto al baño, las claves para reformar un piso para su alquiler y para convertirlo en un piso de estudiantes, sin invertir en exceso y sin enfrascarse en una renovación compleja, incluyen pintar los azulejos, barnizar la bañera, cambiar las cortinas por mamparas, colocar grifería nueva y empotrar los puntos de luz.  

La funcionalidad del mobiliario del baño es también de suma importancia. Debido a su uso diario, los baños se deterioran con mayor rapidez que otras partes del apartamento, por ello se recomienda usar muebles de materiales resistentes a la humedad y que sean tanto modulares como del máximo tamaño posible para optimizar el espacio.

Dormitorios

Preparar los dormitorios es la tarea más sencilla al reformar un piso para alquiler y convertirlo en un piso de estudiantes. Es preferible que cada dormitorio cuente con una ventana al exterior y con un buen aislamiento tanto térmico como acústico. Esto permitirá, por un lado, que no haya un gran gasto de energía en calefactores y aire acondicionado, y, por otro, que las habitaciones entre sí se mantegan aisladas del ruido, pues los y las estudiantes necesitan trabajar en un espacio privado y silencioso.

En cuestión de mobiliario y decoración, cada dormitorio debe contar con los básicos: una cama, un armario y una mesita de noche; pero también resulta imprescindible a la hora de convertir el apartamento en un piso de estudiantes facilitar por habitación un escritorio, preferiblemente con cajones y con una silla cómoda. Además, el cuarto debe tener buena iluminación para mejorar el rendimiento académico y bienestar.

Si bien el proyecto de reformar un piso para su alquiler y convertirlo en un piso de estudiantes no se centra en el diseño de interiores, el buen gusto y la inversión en los detalles puede ayudar a revalorizar la vivienda. En ese sentido, se aconseja apostar en la inclusión de alfombras, cojines y cortinas adecuadas a cada época y que ayuden a sacar partido a cada estancias, pues son detalles que crearán una atmósfera cálida y acogedora, que no pasarán desapercibidos.