Que se dejasen aconsejar, que escuchen al profesional y se dejen guiar por su intuición y elijan al profesional con el que mejor hayan "conectado". Ese profesional les va a acompañar durante varias horas en un momento importante de su vida y ese recuerdo debe de ser de felicidad.

Me inicio en la fotografía de la mano de la Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza, donde gano varios concursos y me anima a realizar exposiciones y participar en revistas nacionales donde se publican algunas de mis fotografías. Comienzo a trabajar de forma profesional como fotógrafo en FIP (Fotografía, Imagen y Publicidad) donde realizo books fotográficos, cubro eventos empresariales, sociales y moda. Lo que más me llama la atención en la fotografía son las personas, los elementos dinámicos que deben coincidir en la composición y revelan emociones. Mi especialidad son las personas, las emociones y los retratos. "Hace retrato psicológico", he oído decir de alguna de mis fotografías. Mi escuela es la fotografía analógica, que para quien no la ha vivido, le diré que es aquellas que disparabas sin ver los resultados hasta que revelabas las fotografías en el laboratorio. Debías de estar muy seguro que en una boda medías de forma correcta la luz, no había margen de error.

No, no tengo un modelo estándar, me ajusto a las necesidades del cliente en función del tiempo de dedicación, medios empleados y trabajo de postprocesado.