El mortero monocapa es un revestimiento a base de cemento, que se utiliza sobre las fachadas para protegerlas, alisarlas y darles color. Este material puede mezclarse con resinas, fibras, pigmentos y minerales, lo cual, aparte de cumplir con una función estética, le permite ofrecer una buena resistencia contra las inclemencias del tiempo.

El coste medio de este servicio es de 20 €/m2. Los precios mínimos y máximos oscilan entre 16 y 30 €/m2, respectivamente. Entre las diferentes variables que pueden tener incidencia en estos valores, es posible mencionar la calidad del material, el tipo de acabado aplicado, o los servicios complementarios que pueden ser susceptibles de contratar para su disposición, como el montaje de andamios. 

Ventajas 

Entre las ventajas de aplicación de este método puede citarse, en primer lugar, su fácil adherencia a la pared. Este método permite prescindir del enfoscado, siendo un sistema que aporta impermeabilización y resistencia frente las inclemencias del tiempo. Su variedad de acabados y colores, así como su fácil mantenimiento, le hacen ser una opción muy solicitada para el revestimiento de fachadas. 

Especialidades del servicio

La aplicación de mortero monocapa requiere de la contratación de mano de obra especializada. El material se distribuye comercialmente en seco y, para su aplicación, se mezcla con agua. Puede ser aplicado a mano o a máquina. 

Tipos de acabados 

Aunque es muy frecuente encontrar su aplicación en las fachadas ofreciendo un aspecto liso y regular, el mortero monocapa puede presentar distintos acabados. 

De una parte, el acabado a gota es similar al gotelé de interiores y se aplica con un máquina especial llamada tirolesa. En segundo lugar, el mortero con árido proyectado presenta una superficie cubierta de mármol fragmentado que se aplica sobre la pasta mientras aún está fresca. Por otra parte, el acabado fratasado se aplica sobre la capa tendida, aún fresca. Los y las especialistas aconsejan usar este acabado en zonas pequeñas, para evitar la destonificación del monocapa. Finalmente, el mortero abujardado o raspado consiste en pulir la superficie una vez seca. 

Estos acabados pueden ser aplicados sobre una gran variedad de soportes, como ladrillos cerámicos, termoarcilla, bloques de arcilla expandida u hormigón. 

Accesibilidad

Los trabajos en fachadas suelen requerir de andamiaje y sistemas de seguridad que se encarecen conforme aumenta la altura. Además, suele ser necesario abonar una tasa al consistorio del municipio por la ocupación temporal del espacio público, que habría que valorar según el caso. Para solicitar la licencia por actuación comunicada suele ser necesario presentar documentación sobre la renovación a la que se está sometiendo el inmueble.  

Recomendaciones generales 

En condiciones generales, no conviene aplicar el mortero monocapa a una temperatura superior a 35ºC, ni inferior a 5ºC. Su aplicación no está recomendada para superficies con gran riesgo de filtraciones y superficies inclinadas. 

Cuando se aplica sobre superficies de antigüedad, es recomendable que la aplicación sea ligera, existiendo además la posibilidad de armar el revestimiento con una malla. 

Finalmente, cabe destacar que los morteros de tonos oscuros suelen ser menos duraderos, visibilizando antes los efectos del desgaste.