La vitrocerámica es ampliamente utilizada en las cocinas domésticas, principalmente porque presenta grandes ventajas: en ella pueden emplearse los mismos utensilios de cocina que se usan en las cocinas a gas –a excepción de las vitrocerámicas de inducción, claro está–, conserva muy bien el calor residual, lo cual implica un ahorro energético si te dispones a aprovecharlo, y es muy fácil de limpiar.

No obstante, lo cierto es que se trata de un electrodoméstico muy delicado, expuesto a altas temperaturas, golpes y rayaduras, por lo que es necesario tener ciertos cuidados a la hora de manipularlo y contactar a un técnico o técnica que se especialice en vitrocerámicas si hubiese algún inconveniente. Los costes de reparar la vitrocerámica pueden oscilar entre los 24 €, valor mínimo a pagar por la localización de la avería y si no se acepta el presupuesto para su reparación, y los 550 €, si se trata de placas de un precio medio-alto y es necesario sustituir el cristal, con una media de 245 €.

Rotura del cristal

Una de las averías más comunes en las cocinas vitrocerámicas es la rotura del cristal. Esto puede ocurrir por colocar ollas demasiado pesadas encima de la vitrocerámica o por un golpe producto de un descuido con algún utensilio de cocina. Si aparece una grieta en el cristal, lo ideal es que detengas su utilización y que contactes a alguien para reparar la vitrocerámica inmediatamente, ya que los vapores o líquidos de la cocina se pueden filtrar y dañar su mecanismo interno; si eso llegara a pasar, puede que tengas que reemplazar la vitrocerámica por completo, en vez de sustituir únicamente el cristal.

Ruidos

Si la vitrocerámica hace ruidos extraños, es probable que el problema se deba a un fallo eléctrico fácil de reparar. Este tipo de averías no suelen ser muy costosas y con un recambio de los cables puede ser suficiente, aunque si dejas el problema sin atender puede que se dañe alguno de los componentes electrónicos y que la reparación resulte más complicada.  

Apagado

Otro de los problemas con que te puedes encontrar es que la vitróceramica no encienda o que se apague mientras está encendida sin ningún motivo aparente. Esto puede deberse a problemas con el termostato, con la resistencia o con la placa de control, por lo que el coste de reparación puede variar según las partes que se tengan que arreglar o reemplazar. Como en los demás casos, lo mejor es contactar inmediatamente al soporte técnico en el momento en que detectas los primeros síntomas de mal funcionamiento.

Vitrocerámica de inducción

Si tu vitrocerámica es de inducción, es decir, si el calor de la cocina se activa con la colocación de ollas o implementos específicos, puedes tener inconvenientes algo más caros de solucionar, además de los mencionados. Las vitrocerámicas de inducción tienen circuitos electrónicos más complejos que las vitrocerámicas comunes y estas placas pueden dañarse y requerir reparaciones. No obstante, también puede ocurrir que solo tengas que reemplazar una pequeña pieza por un coste relativamente bajo, por lo que un fallo en una vitrocerámica de inducción no implica necesariamente un precio de reparación elevado.

Reemplazo

En algunas ocasiones, los daños en la vitrocerámica son irreversibles o muy caros de reparar, por lo que resulta más conveniente reemplazar la cocina. Puedes conseguir placas vitrocerámicas comunes a partir de los 150 €, aunque el precio estándar se sitúa entre 200 € y 250 €, y placas de inducción a partir de los 300 €. Por lo general, los técnicos y técnicas que se dedican a la reparación de vitrocerámica también pueden encargarse del trabajo de instalación de la nueva cocina.